¿Cómo cortarle las uñas a tu gato y no "morir" en el intento?

Arañar es un comportamiento innato, adorable y peligroso en los felinos. A fin de cuentas, es fácil llevarse un arañazo de un minino de recuerdo, incluso durante el juego. La clave está en mantener las garras recortadas, pero: ¿acaso es posible cortarle las uñas a un gato sin "morir" en el intento? La respuesta, aunque sorprenda, es un rotundo sí.

Un gato mostrando sus uñas
Cómo cortar las uñas de tu gato - 123RF

El papel de las uñas en la vida de tu felino

Sin duda alguna, las uñas son el rasgo característico de los gatos. Con ellas realizan actividades propias de su especie, como cazar, trepar, rascarse, arañar, jugar, estirar sus músculos, liberar estrés, e incluso marcar su territorio.

Los gatos necesitan expresarse en su entorno familiar y lo hacen a través de sus uñas. Los arañazos de los gatos sirven para marcar su lugar favorito, su sitio de juego o un objeto que le pertenece. Arañar también es una manera en la que el gato afila sus uñas; algo que necesita para estar preparado para cualquier ocasión.

Ahora bien, por más natural que sea, los arañazos pueden convertirse en un problema para la familia, sobre todo si el felino nunca sale de casa para descargar su energía.

¿Cómo mantener el control de las uñas de tu mascota?

Arañar es un comportamiento innato en los felinos, así que difícilmente lograrás que tu mascota deje de hacerlo por completo. Lo que sí puedes hacer, por el bien de la casa y el mobiliario, es enseñarle desde muy pequeño a canalizar esos impulsos en rascadores.

Este objeto actúa como una lima de uñas y le ayuda a saciar su sed de arañarlo todo. En otras palabras, tener rascadores en casa evitará que tu gatito dañe los muebles y cortinas, además de hacerlo muy feliz.

El mercado está lleno de rascadores funcionales. Hay modelos planos (que suelen costar unos pocos euros) hasta árboles o postes rascadores. Estos últimos funcionan como un parque de diversiones para el minino y contribuyen a su sano esparcimiento.

La mayoría de los gatos que viven en contacto permanente con el exterior no necesitan rascadores o que les recorten las uñas con frecuencia, ya que las desgastan arañando todo a su paso. Si tu felino no sale de casa, lo mejor es cortar las uñas regularmente y regalarle rascadores para que pueda divertirse.

¡Manos a la obra! ¿Cómo cortarle las uñas a un gato?

Si el rascador no es suficiente para mantener a raya el uso de las garras del minino, lo mejor es proceder con el método tradicional: recortar las uñas. Al igual que con el rascador, es necesario acostumbrar al gato a la manicura felina desde pequeño.

  • Consejos para principiantes

Los gatos son ariscos por naturaleza y no suelen dejarse tocar por todos. Acostúmbralo desde pequeño al contacto, a la cercanía con los humanos y a que se deje tocar las patitas. Puedes comenzar presionando ligeramente la almohadilla y entregarle una deliciosa recompensa como refuerzo positivo.

Es importante también que examines sus uñas todas las semanas. En condiciones normales, las uñas del felino estarán retraídas. Si son visibles, incluso estando en reposo, necesitan un corte cuanto antes.

  • Busca siempre el mejor momento

Los gatos necesitan sentirse cómodos para no estar a la defensiva. Por tanto, te conviene elegir un momento en el que esté tranquilo y relajado. Comienza poniendo al gato en tu regazo. Mímalo y toca sus patitas para explorar el terreno. Si se resiste, es mejor dejarlo ir y continuar en otra ocasión.

  • Herramientas adecuadas

Si bien es cierto que puedes usar un cortaúñas convencional, lo mejor es hacerse con un modelo de punta redonda de acero inoxidable. Estos cortaúñas han sido especialmente diseñados para los gatos.

  • La posición correcta

Si sientes que tu gatito está listo para una manicura felina, ¡manos a la obra! Pon el gato sobre tu regazo. Cuida que su carita quede viendo hacia el frente. Con una mano, sujeta el cortaúñas, y con la otra, una de sus patas. Recuerde que las uñas de los gatos son retráctiles: debes presionar ligeramente la almohadilla para liberarlas.

  • Uso adecuado del cortaúñas

Continua la manicura felina con paciencia, presionando siempre para que la uña salga. Bastará con recortar la zona blanca: ¡aléjate del área rosada para no hacerle daño! Un dato importante que muchos olvidan es recortar la uña en dirección al crecimiento. De lo contrario, quedará enganchada con todo.

Corta las uñas con cautela comenzando por las patas delanteras. Intenta no tocar los vasos sanguíneos. Si no estás seguro de dónde comienza la vena interior de la uña, recorta solo la punta.

 

Apóyate en los refuerzos positivos

Busca la golosina preferida de tu gato y prémialo al terminar la faena. El felino comenzará a asociar el corte de las uñas con la satisfacción de una buena comida, haciendo que cada vez sea más fácil el proceso.

Infobox:

Si crees que las uñitas de las patas traseras de tu gato son más largas que las delanteras, ¡estás en lo cierto! Como los gatos usan más las garras del frente, suelen rebajar su largo naturalmente.

Como ves, cortar las uñas de tu gato es más fácil de lo que parece. Pero si no te sientes cómodo haciéndolo, ¡no hay problema! Puedes buscar los servicios profesionales de las clínicas veterinarias y aprovechar para mimar a tu minino.

¿Buscas más consejos para cuidar a tu querido felino? Entonces, te invitamos a revisar nuestra sección de actualidad gatuna. Así, siempre estarás al día con el fascinante mundo animal.

Sobre el autor

Vanessa Galán